Días rojos

Estamos en la cuenta atrás y, por desgracia, no paran de recordárnoslo. En todas partes hay luces colgando, que ya empiezan a encenderse, las compras, las promociones, las plantas de pascua, el rojo cocacolil santaclaudense, que bello o no, se ha apoderado de todo y se come hasta a los Reyes Majos... Por no mencionar los licores y cavas, los anuncios de juguetes, de loterías y sorteos, de comidas navideñas, el pavo? y los turrones.

Y, como advertí a mediados de verano, se termina el plazo de supervivencia que marqué para El vestidor de Carrie y... Lo siento, pero no morirá. No ha concluido la misión. Se encuentra más o menos a la mitad de su ejecución. Si es que he perdido muuuchas batallas últimamente, o he tenido muchos empates.

Gato observa a Holly dormir después de una noche de fiesta
Pero bueno, sigo siendo yo, y creo que más yo de lo que he sido en el último año. No sé, lo veo todo más... verde fuerte y rojo cereza. O verde kiwi y rosso fresón, una combinación de colores que además es una exquisita combinación de frutas. Más como cuando estaba en Madrid. Nada de grises. Nada de días negros y mucho menos rojos.

Sabéis lo que es tener un día rojo, ¿no? ¿Habéis visto Desayuno con diamantes? Será mejor que la propia Audrey os explique qué es un día rojo en un minuto.


(KIT-CAT: Si alguien encuentra un antifaz como ese, por favor que me compre uno. El mío es muy bonito, pero no es como ese...=P)

Pues el caso es que este año ha estado lleno de días negros y rojos para nuestro completo mundo, sea en temas monetarios y económicos con la crisis, hasta la política con los locos dirigentes que tenemos, pasando por todos los problemas a los que estamos sometiendo al medio ambiente, ¡que nos cargamos el planeta, coleguis! 

Y posiblemente hayan predominado los últimos, los días rojos, como ese que está pasando Holly Golightly (Audrey Hepburn) en la primera escena de la película, cuando baja de un taxi a primera hora de la mañana frente al escaparate de Tiffany's con un café y un croasant. Pero os recomiendo una cosa: no os dejéis engañar por los espejismos, porque, a veces, cuando creemos que todo va mal, se trata simplemente de un espejismo que genera nuestra mente delante de nuestros ojos. Una cortinilla de humo. Un estúpido velo.

Personalmente, elijo vivir, reir, tomarlo todo con gracia y humor, con picaresca quizá =P. 
Esta canción me parece taaaan graciosaaaa!!!!

Comentarios

Entradas populares de este blog

El Despertar de la Fuerza... (pause)

Drogadicta de la cama, noctámbula sin remedio

A todo cerdo, en serio