25 de junio de 2015. Año VI d. M.J.J.
Junio suele ser bonito. Mi mes favorito es mayo, por motivos obvios, y septiembre y diciembre después (por motivos no tan obvios, más de fiestas callejeras desde el mediodía), pero en junio siempre me han pasado cosas bonitas, cosas que me han emocionado... menos una. Pero esa "una" no la hubiera sentido así de no ser por haber comenzado todo aquello un 2 de junio, y por consolidarse aún más un 13 de junio. 2 de junio de 1996. Comunión de mi hermanito, Dany. Solo tengo una hermana pequeña, pero mi amigo Dany y yo nos conocemos desde que nacimos y nos llamamos así, "hermanitos". Consabida misa, comida en Bahía Nirri como en la mía y regalitos -tratándose de Dany no podía ser más original- para los amigos. No las típicas chuches, que también, sino un paquete de recuerdos con un cassette. De vuelta a casa, en el coche, puse la cinta en mi walkman. Cara A. Play. Primera canción: No pude pasar de aquí. La escuchaba, rebobinaba y volvía a escucharl