La sempiterna pregunta que nunca falta en una boda

Hace ya casi un decenio, una prima tocaya de mi madre se dirigió a mí cuando aún sólo contaba unos escasos 14 años para hacerme la sempiterna pregunta que surge en mitad de cualquier boda que se precie, hacia los jóvenes solteros susceptibles de ser objeto de tal observación:

- Ven, Naza, guapa. ¿Tú ya tienes novio o qué? -vale, no es un "¿Y tú para cuándo?", pero joder, tenía 14 años-.
- No, yo no uso de eso aún -solía ser mi mordaz respuesta hacia ese ataque de buitres deseosos de carne fresca y saraos que se prestasen a un sin fin de cotilleos familiares-.

La prima, muy lista y muy cariñosa (todo sea dicho), me dijo: "mejor, tú a estudiar, que eres muy joven, y de que termines una carrera ya, entonces, te echas novio, exactamente igual que mi hijo, y mira que bien le ha salido todo". La boda no era la de su hijo. Y nunca, en ninguna otra boda, me volvió a repetir la dichosa pregunta.

Este martes, el día 18, fue el 25 aniversario de mis padres y lo celebramos pasando el día fuera los cuatro juntos (ellos dos, mi hermana y yo) y... ¡oh, caprichosa casualidad! nos fuimos a encontrar con la prima tocaya y su novio. Su saludo fue algo así como "¡Mira la Naza!" (me gusta, es original, apenas un par de personas usan mi segundo nombre) y en cuanto me miró, empezó el ataque:

- ¿Cómo van esos estudios?
- Ya he terminado -respuesta breve, pero con sonrisa orgullosa-.
- ¿Y cómo vamos de novios?

¡Aquí está, señores, la sempiterna pregunta! En este caso, en unas Bodas de Plata. Y al preguntarme, agachó la cabeza y se acercó más a mí para dar intimidad a la situación, la muy tuna...

- No, no tengo novio. Vamos disfrutando de la vida. No hombres, no problemas. Hay tiempo para todo, no hay prisas, soy joven -si hubiera respondido "sí que tengo", estoy segura de que hubiera querido arrastrarme al altar en ese momento-.

Aunque no me lo dijo, creo que mi respuesta la horrorizó. Y no me molesta, porque me cae bien y es maja, pero...

¿A qué viene esa fijación de la gente con que tengas novio y te cases antes de los 25? Vale que es algo a lo que no tenemos que dar importancia, pero es que es repetitivo y molesto. Y más cuando se te considera joven casadera desde ¡¡los 14 años!! ¡Venga hombre!

¿Acaso el no cumplir esas condiciones a los 24 años representa un problema, una desgracia, nos aproximamos a que se nos pase el arroz? ¡PARA NADAAA! En todo caso, el problema está en la existencia de precedentes con los que esperan que te equipares. En mi caso, esto equivale a algunas de mis primas mayores, amantes y sumisas esposas y madres antes de los 25 . Y ni muerta me equipararía a sus planes.

Hello??? Vivimos en el siglo XXI. ¡¡PODEMOS SER SOLTERAS Y FABULOSAS!!



Se acerca el estreno inminente de Sex and the City 2, y me estoy muriendo por verla =P.

Carrie on!!


Comentarios

Entradas populares de este blog

Flaco favor

Han vuelto las duchas calientes con su vapor de agua

A todo cerdo, en serio